¿A qué huele la noche?

Huele a frío y a tranquilidad.
La noche huele a ruido de refrigerador, a respiraciones finas, a ojos cerrados y cuerpos tendidos sobre camas. A veces, en algunas casas, huele a sexo recién hecho, huele a pan recién comido, a vasos en el fregador con residuos de leche. Huele a llantos de recién paridos, huele a toses, a movimientos inconscientes. Huele a sueños incompletos, extraños, melancólicos, a sueños incómodos. La noche nunca huele al día, la noche odia el día. Huele a muebles que rechinan, a libros olvidados, a conversaciones inconclusas, a gotas de regadera.
La noche huele a insectos fastidiosos, a insectos que agonizan.
Huele a temor al crear ruido de las personas que nunca duermen.
Huele y sabe a silencio. A llantos silenciosos e infidelidades.
Huele a perros aullando, voces de muertos, a tumbas cerradas.
Huele a gente, la noche siempre huele a gente. También a televisiones apagadas. Existen noches en las que hay luces luminosas, sudor, alucinógenos a todo eso huele. Huele a autos lejanos y semáforos naranjas. Huele a prostitutas y a lugares cerrados.
Muchas veces huele a soledad, a humedad.
A relojes trabajando, a la oportunidad que le damos a sus manecillas para oírlas.
A calles vacías.
A lecturas a luz tenue.
Al recuento del día.
A ideas, a las ganas de que amanezca, a la duda si despertaremos…

¿A qué huele tu noche?

Texto que me autorizo Kenia (una buena amiga) ah poner aquí en mi blog. Pues me gusto lo suficiente como para querer compartirlo :D